Es el nombre de este cuadro de Walter Langley (1852-1922), pintor realista inglés. Además del poético nombre, la imagen expresa todo lo que sucede. Una mujer llora. Otra mujer, más vieja y habituada al dolor, la consuela. Por detrás de ellas, el mar, calmo y reflejando la última luz de la tarde. Las barcas de pescadores ya han regresado. Un faro comienza a iluminar y forma un tenue camino de luz hacia las mujeres. En poco tiempo, caerá la noche. Él no ha vuelto. La mujer pierde la esperanza. Es lo que me sugiere. ¿Y a vos?
