Llora, llora, urataú

Hay poetas que a cierta altura dan la impresión de estar perfectamente pasados de moda y son justamente olvidados. Pero hay otros que no merecen ese destino.

Carlos Guido y Spano es un caso. Es cierto que muchas de sus poesías tienen algún aroma a óxido, sin embargo, escribió algunas que son memorables. Clásicas de la literatura argentina. "Nenia" (Canción fúnebre) es una.

El poema se refiere a la guerra de la Triple Alianza, en la que Argentina, Uruguay y Brasil derrotaron al Paraguay.

Mi opinión sobre la guerra, queda en boca de la muchacha paraguaya. Relean, si conocen el poema. O lean, si lo desconocen.




En idioma guaraní,
una joven paraguaya
tiernas endechas ensaya
cantando en el arpa así,
en idioma guaraní:

¡Llora, llora urutaú
en las ramas del yatay,
ya no existe el Paraguay
donde nací como tú ­
¡llora, llora urutaú!

¡En el dulce Lambaré
feliz era en mi cabaña;
vino la guerra y su saña
no ha dejado nada en pie
en el dulce Lambaré!

¡Padre, madre, hermanos! ¡Ay!
Todo en el mundo he perdido;
en mi corazón partido
sólo amargas penas hay ­
¡Padre, madre, hermanos! ¡Ay!

De un verde ubirapitá
mi novio que combatió
como un héroe en el Timbó,
al pie sepultado está
¡de un verde ubirapitá!

Rasgado el blanco tipoy
tengo en señal de mi duelo,
y en aquel sagrado suelo
de rodillas siempre estoy,
rasgado en blando tipoy.

Lo mataron los cambá
no pudiéndolo rendir;
él fue el último en salir
de Curuzú y Humaitá ­
¡Lo mataron los cambá!

¡Por qué, cielos, no morí
cuando me estrechó triunfante
entre sus brazos mi amante
después de Curupaití!
¡Por qué, cielos, no morí!...

¡Llora, llora, urutaú
en las ramas del yatay;
ya no existe el Paraguay
donde nací como tú
¡Llora, llora, urutaú!